VIH/SIDA en niños

¿Qué es el VIH?

El virus de inmunodeficiencia humana (VIH o HIV, por sus siglas en inglés) es el virus que provoca el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA o AIDS, por sus siglas en inglés) Este virus destruye o inhibe las células del sistema inmunológico y destruye de manera progresiva la capacidad del cuerpo de defenderse contra infecciones y ciertos cánceres. En adultos y adolescentes, el VIH suele transmitirse por el contacto sexual con una persona infectada. En EE. UU., casi todas las infecciones por VIH detectadas en niños menores de 13 años se deben a transmisión vertical, es decir, cuando el virus se transmite al niño dentro del útero de su madre o al atravesar el canal de parto, o bien mediante la leche materna. Antes del año 1985, un pequeño grupo de niños se infectó con el virus mediante productos derivados de la sangre contaminados. A partir de 1985, comenzaron a realizarse estudios de detección de rutina. No todos los niños cuyas madres están infectadas con VIH contraen el virus.

  • En EE. UU., los adolescentes entre los 13 y los 24 años, en especial entre grupos minoritarios, representan uno de los grupos VIH positivos de crecimiento más rápido.

  • La cantidad de bebés VIH positivos nacidos de una madre infectada ha disminuido. Esta reducción refleja el uso de nuevos medicamentos antirretrovíricos administrados a la madre antes de que nazca el bebé y al bebé luego de nacer. Debido a que la transmisión con frecuencia ocurre durante el parto, es posible que se indique cesárea para algunas mujeres.

¿Cómo se transmite o propaga el VIH?

A continuación se enumeran los medios de transmisión del VIH:

  • Transmisión vertical. El VIH puede transmitirse a los bebés que nacen de, o son amamantados por, mujeres infectadas con el virus.

  • Contacto sexual. En adultos y adolescentes, el VIH suele transmitirse por el contacto sexual con una persona infectada. El virus entra al cuerpo a través del revestimiento de la vagina, la vulva, el pene, el recto o la boca durante una relación sexual.

  • Contaminación de la sangre. El VIH también puede transmitirse mediante el contacto con sangre infectada. Sin embargo, debido a los estudios de detección realizados para comprobar la existencia rastros de infección por VIH en la sangre donada, el riesgo de contraer el virus mediante transfusiones de sangre es extremadamente bajo.

  • Agujas. El VIH frecuentemente se transmite al compartir agujas, jeringuillas o instrumentos para administración de drogas con una persona infectada. La transmisión del virus del paciente a los profesionales del cuidado de la salud o viceversa a través de pinchazos accidentales con agujas contaminadas u otros instrumentos médicos es poco común.

No se conocen casos de transmisión de VIH/SIDA a través de lo siguiente:

  • Saliva

  • Transpiración

  • Lágrimas

  • Contacto casual como compartir utensilios para alimentos, toallas y ropa de cama

  • Piscinas

  • Teléfonos

  • Asientos de retretes

  • Picaduras de insectos (como los mosquitos)

¿Cuáles son los síntomas del VIH?

Los síntomas varían en función de la edad del niño. A continuación, se enumeran los síntomas más comunes de la infección por VIH. Sin embargo, cada bebé, niño y adolescente puede experimentarlos en forma diferente. Los síntomas pueden incluir:

  • Bebés. Puede resultar difícil determinar el estadio del VIH durante el primer año de vida, por eso deben repetirse los exámenes. Los síntomas pueden incluir:

    • Dificultad para desarrollarse. Retardo del crecimiento físico y el desarrollo manifestados por deficiencias en el aumento de peso y en el crecimiento óseo.

    • Hinchazón abdominal.Debido a la hinchazón del hígado y el bazo.

    • Ganglios linfáticos inflamados.

    • Diarrea intermitente. Diarrea que aparece y desaparece.

    • Neumonía.

    • Candidiasis bucal. Infección por hongos en la boca caracterizada por manchas blancas en el interior de las mejillas y en la lengua. Estas lesiones pueden ser dolorosas para el bebé.

  • Niños. Los síntomas que se observan en los niños mayores de 1 año pueden clasificarse en tres categorías diferentes, de leves a severos. Pueden incluir los síntomas anteriormente mencionados, pero también los que se presentan a continuación:

Leves

Moderados

Severos

Ganglios linfáticos inflamados.

Neumonitis - hinchazón e inflamación del tejido pulmonar

Dos infecciones bacterianas en el lapso de 2 años (meningitis, infección de la sangre o neumonía)

Hinchazón de la glándula parótida (glándulas salivares ubicadas en la parte frontal del oído)

Candidiasis oral que subsiste durante más de 2 meses

Infección por honguillos (hongos levaduriformes) que se presenta en el sistema digestivo o en los pulmones

Infecciones de los senos paranasales constantes o recurrentes

Diarrea constante o recurrente

Encefalopatía - inflamación del cerebro

Infecciones de los oídos constantes o recurrentes

Fiebre que persiste durante más de un mes

Tumores o lesiones malignos

Dermatitis - erupción de la piel que produce comezón

Hepatitis - inflamación del hígado a menudo causada por una infección

Neumonía por Pneumocystis jiroveci (tipo de neumonía más frecuente asociada con el VIH)

Hinchazón abdominal debido a un aumento del tamaño del hígado y del bazo

Varicela complicada

 

 

Enfermedad de los riñones

 

  • Adolescentes. Los síntomas del VIH en los adolescentes pueden ser similares a los de los niños, y también pueden parecerse más a los síntomas que suelen presentarse en adultos con VIH. Algunos adolescentes pueden desarrollar una enfermedad similar a la gripe dentro del mes o dos meses posteriores a la exposición al VIH, aunque algunas personas pueden no desarrollar ningún síntoma cuando se infectan. Además, los síntomas que se presentan, que en general desaparecen en entre una semana y un mes, suelen confundirse con los de otras infecciones víricas. Los síntomas pueden incluir lo siguiente:

    • Fiebre

    • Dolor de cabeza

    • Malestar (no sentirse bien)

    • Ganglios linfáticos inflamados

Es posible que no aparezcan síntomas persistentes o severos hasta después de 10 años o más desde el ingreso de la infección por VIH al cuerpo de adolescentes y adultos. Este período "asintomático" de la infección varía considerablemente de una persona a otra. No obstante, durante el periodo asintomático, el virus VIH está activamente infectando y matando células del sistema inmune. Su efecto más obvio es la disminución de los niveles de células CD4+ en la sangre (también llamadas "células T4"), defensoras clave del sistema inmunológico contra las infecciones. El virus inicialmente anula o destruye estas células sin provocar síntomas.

En general se diagnostica SIDA a un niño infectado por VIH cuando su sistema inmunológico está gravemente dañado o se producen otros tipos de infecciones. A medida que el sistema inmunológico se deteriora, las complicaciones comienzan a aparecer. A continuación se enumeran las complicaciones o síntomas más comunes del SIDA. Sin embargo, cada niño puede experimentarlos de forma diferente. Los síntomas pueden incluir lo siguiente:

  • Aumento del tamaño de los nódulos linfáticos persistente durante más de tres meses

  • Falta de energía

  • Pérdida de peso

  • Fiebre o transpiración frecuente

  • Infecciones por honguillos frecuentes o persistentes (orales o vaginales)

  • Erupciones o descamación de la piel persistentes

  • Enfermedad pélvica inflamatoria que no responde al tratamiento

  • Pérdida de la memoria a corto plazo

  • Infecciones graves o inusuales ("infecciones oportunistas") 

Algunas personas desarrollan infecciones frecuentes y severas por el virus herpes que provocan úlceras en la boca, los genitales o el ano, o una reactivación de la varicela conocida como "herpes zoster".

Los síntomas del VIH pueden parecerse a los de otras enfermedades o trastornos médicos. Siempre consulte al médico de su hijo para obtener un diagnóstico.

¿Cómo se diagnostica el VIH?

El diagnóstico de una infección por VIH durante el primer año de vida depende de si se detecta el virus. Todos los bebés nacidos de madres infectadas con VIH obtienen un resultado positivo en los análisis de anticuerpos al nacer debido a la transferencia pasiva del anticuerpo VIH a través de la placenta. Por lo tanto, el diagnóstico se confirma mediante exámenes virológicos.

Para bebés nacidos de madres infectadas con VIH, el diagnóstico en general se realiza durante los primeros 2 días de vida, al cumplirse 1 o 2 meses y a los 4 a 6 meses de vida. Se puede lograr un diagnóstico de infección por VIH mediante dos exámenes virológicos positivos obtenidos de diferentes muestras de sangre.

En niños mayores de 18 meses, adolescentes y adultos, se puede lograr un diagnóstico mediante un análisis de sangre que detecte la presencia del anticuerpo VIH.

¿Es seguro para los niños con VIH recibir vacunas de rutina?

  • La vacuna "triple vírica" o MMR, por sus siglas en inglés, (contra el sarampión, las paperas y la rubéola) puede administrarse a niños con VIH, a menos que su sistema inmunológico esté gravemente debilitado.

  • La vacuna DTaP/Td (contra la difteria, el tétanos y la tos ferina) puede administrarse a bebés y niños con VIH.

  • La vacuna Hib (contra la haemophilus influenzae tipo b) y la vacuna Hep B (contra la hepatitis B) pueden administrarse a niños con VIH.

  • Las vacunas contra la hepatitis A y B son seguras para niños con VIH.

  • La vacuna VZIG (contra la varicela) debe evaluarse en casos confirmados de niños VIH positivo en función del estado de su sistema inmunológico.

  • Se recomienda la vacunación anual contra la gripe para los niños con VIH así como también para las personas que vivan en la misma casa que el niño infectado. Existen dos tipos de vacuna contra la gripe. Los niños y adultos con VIH deberían recibirla en forma de inyección y no de spray nasal, porque contiene un virus vivo. La vacuna antineumocócica puede administrarse sin riesgo a niños infectados con VIH que tengan la edad adecuada.

Siempre consulte al médico de su hijo sobre la vacunación para un niño con infección por VIH.

¿Cuál es el tratamiento para el VIH?

Es probable que las personas VIH positivas tengan que ver a un especialista. Al igual que con muchas otras enfermedades, la detección precoz permite más opciones de tratamiento. En la actualidad, si bien existen tratamientos médicos que pueden disminuir la velocidad a la que el virus VIH debilita el sistema inmunológico, no se ha encontrado cura para la enfermedad. Sin embargo, se dispone de otros tratamientos que pueden prevenir o curar las enfermedades asociadas con el SIDA. Puede administrarse terapia antirretrovírica a una embarazada, y se ha comprobado que reduce en gran medida las posibilidades de que un niño desarrolle VIH. Es posible que se recomiende una cesárea para disminuir la posibilidad de transmisión al bebé durante su paso por el canal de parto. En EE. UU., donde se dispone de otras opciones para la alimentación del bebé, se recomienda que las madres infectadas no amamanten a sus bebés. Consulte al médico de su hijo para más información sobre las distintas terapias con medicamentos.