Electrocardiograma de esfuerzo en niños

¿Qué es un electrocardiograma de esfuerzo?

Un electrocardiograma (también llamado ECG) es un procedimiento sencillo y rápido utilizado para evaluar el ritmo cardíaco y el tamaño del corazón. Se colocan electrodos (pequeños parches de plástico) en el pecho, en los brazos y en las piernas. Los electrodos se conectan a la máquina de ECG por medio de cables, la cual mide e imprime la actividad eléctrica del corazón de su hijo, para su posterior interpretación del médico.

Se realiza un ECG de esfuerzo para evaluar la respuesta del corazón al esfuerzo o al ejercicio. El ECG se monitorea mientras que el niño se ejercita en una cinta continua o en una bicicleta estática. Los electrodos de los brazos y las piernas se modifican para facilitar el ejercicio. Si bien este procedimiento rara vez se utiliza en niños pequeños, puede ser muy útil en la evaluación de adolescentes y adultos jóvenes.

¿Cómo se realiza un ECG de esfuerzo?

El procedimiento se realiza en un consultorio médico o en un hospital. El equipo utilizado incluye una máquina de ECG, electrodos (parches pequeños de plástico que se pegan en la piel) y los cables que conectan los electrodos a la piel. También se utiliza un tensiómetro para controlar la respuesta de la presión arterial de su hijo durante el ejercicio. Se utiliza una banda continua o una bicicleta fija para realizar el ejercicio.

Su hijo tendrá una lectura inicial o "base" de un ECG y de su presión arterial antes de comenzar a hacer esfuerzos. Su hijo o hija deberá caminar en la banda o pedalear en la bicicleta durante la etapa de ejercicio del procedimiento. Gradualmente, se inclina la banda o se incrementa la resistencia de la bicicleta con el fin de aumentar la intensidad del ejercicio. Se controla el ECG y la presión arterial durante la etapa de ejercicio de la prueba. Durante el ejercicio, también deben controlarse cuidadosamente los síntomas. Le pedirán a su hijo que realice el ejercicio lo mejor que pueda, pero no hasta el agotamiento. Luego del ejercicio, se controlan las lecturas del ECG y de la presión arterial durante un breve período de tiempo, quizás unos 10 o 15 minutos más.

El procedimiento demora aproximadamente una hora, contando el registro de entrada, la preparación y el procedimiento en sí.

Luego del procedimiento, no es necesaria una hospitalización, a menos que el médico de su niño determine por su condición requiere de mayor observación o de una internación.

Su niño puede sentirse un poco cansado o dolorido durante algunas horas después del procedimiento, especialmente si no acostumbra hacer ejercicio. De no ser así, su hijo debe sentirse normal poco después del procedimiento.

Según los resultados del ECG de esfuerzo, podrían programarse exámenes o procedimientos adicionales para reunir más información de diagnóstico.